sábado, 6 de agosto de 2011

En Víspera de mi año nuevo



(Aunque sea con algo de retraso)

Una intensa lección de humildad. Pues aun tras de lo leído y aprendido en años de carrera me pudieron preparar para lo vivido en los últimos meses. Lecciones de profundas implicaciones en todas las áreas de mi vida. Abrir nuevos horizontes, saborear lejanas tierras, oler nuevas esencias y oh Dios, sobre todo ESA esencia, ensanchar la experiencia de la vida, temer de lo desconocido, pero sobreponerme a ello, compartir nuevos mundos, sueños y fantasías, caray! Vivir la vida!!! Duelen, porque hubo de todo, aunque igual no de todo (paradoja intencional pues no hubo la honestidad recíproca, o al menos no la hubo a tiempo), pero no daré carpetazo, no haré como si nada hubiera pasado. Elaboraré, tal como mi corazón lo pide y necesita. Consecuente con mis Valores y mi profesión, estoy elaborando, poco a poco, aunque duela tanto. No haré como dijo Doña Aiuola: querer ser otro, pero no cambiar. Seguiré siendo yo mismo, no tengo porque "reinventarme" yo se quién soy! incorporando tantas y tan nobles lecciones, porque desde que me subí a ese avión y Viaje al Oriente, sabiendo que mi vida no volvería a ser la misma, sabía que al final seguiría estando conmigo, aunque mucho desee que tú también estuvieras conmigo.Y aun podría darse, quién sabe! de una nueva forma, desde luego. (¿Querrás?)

Seguro de la honestidad de mis sentimientos, intensiones y deseos, sólo me queda tratar de crear un recuerdo sano, limpio y verdadero, cualquier otra cosa no me servirá de nada y traería más dolor. Quedará lo que fue, nada más, pero nada menos, aunque me da algo de miedo. El regocijo de los sueños realizados y saber capaz de luchar por ellos, como siempre ha sido en mi vida, ha de ser por donde empiece, o por donde termine, aun no lo he decidido. Rogaré a mis Siete  Sabios Maestros, por su guía y consejo, porque reconozco que aquí, como otras tantas materias, mi conocimiento es excedido por la inmensidad de la vivencia. Y sigo aprendiendo, como siempre ha sido, creciendo, reconociendo mis errores y valorando mis aciertos, eso no me avergüenza, pues es lo que me ha valido el respeto y el cariño de valiosísimas personas. Y eso, eso, es lo mejor de todo.

Así pues, en esta Víspera de mi Año Nuevo, sigo mi Viaje al Occidente, agradecido con la Vida; al encuentro de mi Destino, que sigue siendo más o menos el mismo, soñar y realizar sueños, estar presente ahí donde surgen los más profundos deseos y sueños, porque eso es de son lo más valioso que tenemos, ya que la firmeza de estos puede verse reflejada en el brillo de la mirada y la intensidad de una sonrisa,  porque  son nuestro reflejo, porque son nuestro yo…como los vimos en nuestras miradas...aunque ahora lo nieges y digas que no pasó nada...

Dios, si tan sólo....

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